lunes, 8 de febrero de 2010

Podría ser un anuncio...

>...pero no lo es.
Simplemente un homenaje a una de mis fidelidades que se remontan en el pasado lejano, gracias a su buen sabor, cuerpo y presencia.
Recuerdos compartidos en la vieja bodega del Berna en la calle Santa Isabel de Madrid en los primeros ochenta. Todo un descubrimiento.




La meva estimada
jo me l´estimo tant
Rem Faperò només pensa amb mi,
quant la tinc el davant
És bruna de cos té la pell llampantva
vestida de verd,
porta un mocador blancun estel roig a la solapa,
ella també viu lluitantsi
més no em dona forces per seguir endavant.
Té el cul tan rodo té un coll tan excitantté
un suc que sempre estaria xarrupantla
prenc per la cintura,
la poso horitzontali
els meus llavis viciosos
cap el mateix forat sempre van.
La meva estimada, jo me l’estimo tant
que em segueix arreu dels Països Catalans.
Me l´estimo amb força,
mai ningú ha estimat tant
la meva estimada és una Voll Damm
Me l´estimo amb força,
mai ningú ha estimat tant
la meva estimada és una Voll Damm
Me l´estimo amb força,
mai ningú ha estimat tant
la meva estimada és una Voll Damm



P: Un fuerte abrazo para Jordi, Ana y su preciosa pequeñaja María.

3 comentarios:

KALMA dijo...

Hola! Pedazo de canción, sabes la 1ª dirección que aprendí en Madrid fue Santa Isabel 27, donde vivían... rodeada de 2 tascas, donde tomar vermú de barril,

Porverita dijo...

Preciosa música y bonita rememoración de los tiempos pasados.

Eres un romántico perdido.

Otoski dijo...

¿romántico rima con alcohólico!

no querrías decir lo segundo!!!

Bueno que se sepa que esta vieja fidelidad es compartida por toda la familota, excepto el menor de edad claro.

Por cierto que parece ser que la fábrica DAMM fue colectivizada durante la "revolución anarquista" del 36 al 39, y funcionó aún mejor con las asambleas de obreros que después y antes con los patronos. Ya buscaré algo al respecto para colgarlo!!!

Salud